Carta pública de Julio Moreno Ventas

ME VOY PERO ME QUEDO

El próximo día 2 de octubre de 2013 será la fecha en la que dejaré de prestar mis servicios profesionales a las Administraciones Públicas españolas, que es tanto como decir a mis conciudadanos, para pasar a ser un jubiloso pensionista.
Habrán transcurrido 40 años, dos meses y 17 días desde que tomé posesión de aquel mi primer destino en Huelva, cuando contaba con 25 añitos de edad.
Desde entonces he desempeñado mi tarea en 15 destinos diferentes, en algunos por muy poco tiempo y en otros por más, batiendo mi récord de permanencia al frente de la Agencia Andaluza de Promoción Exterior, EXTENDA, en donde permanecí 11 años.
El tiempo se repartió entre los 27 años que serví a la Comunidad Autónoma de ANDALUCIA y los 13 y pico a la Administración General del Estado.

Cuando ingresé eran los últimos años de la dictadura franquista y después mi trabajo estuvo al servicio de los Gobiernos de la UCD, del PSOE y del PP y, aunque no todos me trataron igual, a todos serví con la misma lealtad y rigor profesional. Con legítimo orgullo puedo decir que, sin militar en las filas de partido alguno, tuve importantes responsabilidades en momentos determinantes y en muchas ocasiones tuve la suerte de contribuir a poner en marcha nuevos proyectos o a tratar de redefinir antiguas tareas. 

A lo largo de esa trayectoria ha habido de todo, pero en general me siento muy afortunado porque he podido disfrutar con todo lo que hice, he tenido buenos compañeros de viaje y hasta buenos jefes. Conservo muy buenos recuerdos de mi paso por todos los destinos y –lo más importante- amigos en todos los lugares, aunque alguna vez también me llevé decepciones con algunos a los que creí leales y no lo fueron.

Y llega la hora del punto final a mi carrera en el sector público. Pido perdón si alguna vez no cumplí con las expectativas que generé y doy gracias infinitas a todos los que me ayudaron a ser feliz con mi trabajo, bien porque me otorgaron su confianza o bien porque me ayudaron a hacerlo lo mejor que supimos.

Me conocéis y podéis imaginar que no me quedaré inactivo; voy a hacer cosas que me apetecen, colaborar con amigos, escribir, jugar al golf e incluso volver al mundo de la interpretación que nunca es tarde para triunfar.
Pero esté en donde esté y haga lo que haga, siempre encontraréis en mí al AMIGO que quise ser con mis virtudes y mis defectos, mis cualidades y mis muchas carencias.
Por eso esta no puede ser una despedida, sino un HASTA SIEMPRE.

Julio Moreno Ventas

Julio Moreno Ventas deja la función pública española y se despide, con la carta que transcribimos. Lo hacemos, aunque se enoje, para que llegue a todos los amigos que lo conocieron y para que quienes no, conozcan como piensa y como siente una persona que impecablemente honró su trabajo y sus jerarquías!