Los bosques de Cariló, fueron "creados" por el hombre . No fue la naturaleza quien los puso allí. Por eso, el bosque de Cariló es diferente a otros. En ellos, conviven especies no autóctonas llegadas de los rincones más recónditos del planeta para conformar una espesura diversa, variada, reconfortante en uno y mil sentidos.
Pinos del mediterráneo y de California , eucaliptos de Nueva Zelanda y Australia, robles, encinas , abetos, cerezos, arces , casuarinas, entre otras tantas especies de distintos verdes, amarillos y ocres, son la usina perfecta de aire fresco , perfecto ....
Aromas, colores, texturas, matices , se ofrecen generosos en un bosque a veces espeso, oscuro y otras luminoso , abierto y lo convierten en ideal para realizar la "cabalgata " de los "sueños".
En Zorzal y Cerezo, un grupo familiar sabe, además, como ofrecer ese "extra" que hace sentir cómodo a todo aquel que se acerca para montar los caballos del puesto y compartir un clásico mate si acaso toca esperar un poco. O no. Porque el ofrecimiento del mate surge siempre generoso, para extender la charla y ese momento de agradable bienestar en medio del bosque.
Dalmiro y Mónica junto a sus hijos Paola y Martín y los amigos de éstos, Tomás, Juan, Nicolás, Bautista y Ayelén a los que se suman otros con entusiasmo cada temporada alta, esperan a lo largo de todo el año, la oportunidad de guiar a quien quiere ser guiado, aconsejar a aquel que quiere incursionar solo y ofrecer siempre, con generosidad, esa sonrisa abierta de los hombres del campo bonaerense mientras también disfrutan de las cabalgatas por el médano, la playa y el bosque. Vale la pena intentarlo porque no hace falta ser un experto jinete para gozar de la maravillosa armonía del bosque que Cariló ofrece.
Y que tal una cabalgata en Cariló para este fin de semana, en @PinamarTurismo ? http://t.co/mjEixnnX98
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— Turismo Tv (@turismoteve) diciembre 19, 2014